El cementerio municipal de Xerta está ubicado al regazo del plan de Santo Martí, frente a la carretera de Paüls. Según consta al archivo parroquial fue bendecido con toda solemnidad en 1834. Hasta aquel año, el antiguo cementerio, denominado popularmente “el fossaret” estaba situado junto a la iglesia parroquial, al solar que actualmente ocupan la calle Abadía, la casa Abadía y parte de la plaza Mayor. Ante la epidemia de cólera morbo asiático que castigó todo el país, las autoridades decretaron trasladar todos los cementerios en las afueras de las poblaciones y en el caso de Xerta se situó donde antiguamente se erigía el antiguo Calvario, a los pies de la ermita de Santo Martí.

El cementerio está formado por diez zonas de nichos distribuidos en tres pisos. Se ha ido ampliando a lo largo de los años. A la parte más antigua destacan los panteones de las antiguas familias acomodadas del pueblo.

La capilla del cementerio, situada frente a la entrada, fecha del año 1899 y la portalada del recinto fue construida en 1912 por el maestro de obras xertolí Samuel Falcó.