Escudo
El escudo de Xerta está formado por el Naranjo, en representación de las actividades agrícolas que se han ido desarrollando a lo largo de la historia de la Villa y que han significado el principal recurso económico de sus habitantes. Así pues, el escudo del Naranjo simboliza en especial relevancia las frutas de la familia de los cítricos, principal cultivo de regadío de la población. Los campos de Xerta, regados por las aguas de las Fuentes de los Ullals y por las del Ebro, producen verduras, forraje y frutas, especialmente cítricos: naranjas, mandarinas y limones.
Históricamente, el Naranjo ya aparece como símbolo identificativo de Xerta en el periodo de la segregación con Tortosa, a finales del siglo XVI y principios del siglo XVII, para diferenciar las armas de la ciudad de Tortosa de las de la villa. De este modo se adoptó por el primer Consejo Municipal como escudo de la Villa con la formalización de la Segregación el 1628.
En el escudo episcopal del ilustre hijo de Xerta Joan Sintiera y Sunyer (1561-1632), obispo de Barcelona y Virrey de Cataluña, podemos observar que entre otros temas aparece el Naranjo, en motivo de la representación de su lugar de procedencia. También lo encontramos esculpido en una de las claves de las cúpulas de la nave principal de la iglesia parroquial construida entre 1580 y 1690.
Anteriormente, el escudo se representaba de dos maneras, principalmente utilizando el Naranjo en medio de un campo y al natural. Uno era truncado; a la parte superior se representaba el naranjo y a la parte inferior los cuatro palos de la señera, señal que desapareció en el escudo oficial utilizado actualmente puesto que Xerta nunca ha sido una villa real.
El escudo oficial actual fue aprobado por la Generalitat de Cataluña el 15 de marzo de 1984 y tiene el siguiente blasonamiento: Un escudo embaldosado, de plata, un naranjo arrancado de sinople afrutado de anaranjado. Por timbre una corona mural de Vila.